Orar según la voluntad de Dios.

¿Cómo orar según la voluntad de Dios? He aquí siete principios básicos.

I.- No escogimos nosotros a Jesús, sino que Jesús nos escogió a nosotros y nos comisionó para que vayamos y demos fruto, un fruto que perdure. Así el Santo de Israel nos dará todo lo que le pidamos en nombre de su Hijo Jesucristo (Jn. 15:16). 

 Fuimos comisionados para dar frutos, no para ser cristianos improductivos. El fruto de nuestra vida como cristianos es muy importante para que nuestras oraciones sean escuchadas.

II.- Se nos concederá lo que queramos pedir si permanecemos en Cristo, y sus palabras permanecen en nosotros (Jn. 15:7).

 Permanecer en Cristo es obedecer sus mandamientos.

III.- Yo (Jesús) haré cualquier cosa que pidan en mi nombre. Así será glorificado el Padre en el Hijo (Jn. 14:13-14)

IV.- Dios nos oye, si pedimos conforme a su voluntad (Mt. 26:39; 1Jn. 5:14-15).

V.- Si creemos, si tenemos fe y no dudamos, recibiremos todo lo que pidamos en oración (Mt. 21:21-22; Mr. 11:22-24).

VI.- Creamos que ya hemos recibido todo lo que estemos pidiendo en oración, y lo obtendremos (1Jn. 5:14-15).

 Seamos agradecidos como señal de que creemos que hemos recibido de Dios la respuesta a nuestras oraciones.

VII.- Estemos alerta y oremos para que no caigamos en tentación. Pues nuestro espíritu está dispuesto, pero el cuerpo es débil (Mt. 26:39,42; Lc. 22:42).

Comentario: Estemos alerta para rechazar al mal cada vez que toque las puertas de nuestra vida. En la oración clamamos por el poder de Dios para vencer al mal. No olvidemos que es el Espíritu de Dios quien lucha por nosotros.